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Mostrando las entradas de junio, 2022

El premio celestial a nuestra confianza en Dios

Dios está contigo ahora. Él te acompaña y te lleva de Su mano poderosa. A pesar de tus lágrimas, a pesar de tus dudas y flaquezas, Él todavía está contigo. Y te lo recuerda en Su palabra por medio de lo que escribió el apóstol Pedro: “Por eso, alégrense, aunque sea necesario que por algún tiempo tengan muchos problemas y dificultades. Porque la confianza que ustedes tienen en Dios es como el oro: así como la calidad del oro se prueba con fuego, la confianza que ustedes tienen en Dios se prueba por medio de los problemas. Si ustedes pasan la prueba, su confianza será más valiosa que el oro, pues el oro se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la confianza que ustedes tienen en Dios, porque una confianza que se ha probado tanto merece ser muy alabada. Aunque nunca hayas visto a Jesucristo, lo amas y crees en él, y tienes una alegría tan grande y hermosa que no puede describirse con palabras. Vives alegre porque ya sabes que Dios te salvará, y por eso confías en

UN CONSEJO QUE TE EVITARÁ MUCHO SUFRIMIENTO

Si te haces fiador de las deudas de otro, lo vas a lamentar; si te niegas a ser fiador de los demás, vivirás tranquilo. Te escribo este consejo porque puede ser que al leerlo tus ojos sean abiertos y te evites muchos sufrimientos. Hay al menos seis ocasiones diferentes en las que Proverbios nos advierte contra ser un fiador, en este mensaje te estoy compartiendo proverbios 11:15. Cuando garantizas la deuda de otro, eres responsable de su acción o de su inacción. Y algo que muchos no analizan, pero que Dios en toda su sabiduría lo conoce es que una persona que tiene que solicitar un garante suele ser alguien que un banco o una empresa considera de mayor riesgo. Ya para empezar, al tú servir de fiador estás envuelto en una transacción de alto riesgo. Por eso, muchos de los que se convierten en fiadores lo lamentan profundamente. El alto riesgo que el banco no está dispuesto a asumir se convierte en tu riesgo. No es de extrañar entonces saber que la mayoría de las veces, el fiador es quié

Lo que Dios pide de nosotros

Recuerdo que en noviembre escribí que como seres humanos somos muy olvidadizos. Muy rápido se nos olvida de dónde nos sacó el Señor, olvidamos Su obra maravillosa en nosotros y la preciosa paz que experimentamos el día que Él nos abrazó por primera vez. El mismo problema que tuvo el pueblo de Israel hace tantos años es el que tenemos ahora: la pasión que sentimos por nuestro Dios se evapora de a poquito con todas las cosas que tenemos que hacer. Pero Dios no se conforma con eso. Y Él te llama a sus brazos nuevamente, para que estés con Él y para que recuperes tu primer amor. Por eso le decía a Su pueblo: “¿Qué voy a hacer contigo, Efraín? ¿Qué voy a hacer contigo, Judá? El amor de ustedes es como nube matutina, como rocío que temprano se evapora”. Oseas 6:4  Y también se lo recordó a la iglesia de Éfeso, ellos se jactaban de sus buenas obras, pero Dios les recordó que a pesar de todo eso: “Hay algo que no me gusta de ti, y es que ya no me amas tanto como me amabas cuando te hiciste cri

Dios quiere perdonarte, escucharte y restaurarte

¿Deseas que el Señor mantenga sus ojos abiertos y atentos sus oídos a tus oraciones? ¿Deseas que Dios te escoja y te consagre para habitar en ti? ¿Y que Sus ojos y su corazón siempre estén en ti? Te tengo una noticia… Dios desea con todo su corazón que esto se haga realidad en tu vida! Y es por eso que en 2 Crónicas 7.14 te dice cómo debes lograrlo. “si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra. Mantendré abiertos mis ojos, y atentos mis oídos a las oraciones que se eleven en este lugar. Desde ahora y para siempre escojo y consagro este templo para habitar en él. Mis ojos y mi corazón siempre estarán allí.” 2 Crónicas 7.14-16 Humillarse implica reconocer que necesitamos el perdón de Dios. También nos dice que oremos y busquemos de Dios, este “buscarlo” no es para jugar a las escondidas, es para que lo conozcamos! Él nos dice: “Lo que pido de ustedes es amor y no s