Detente un momento

Detente un momento y deja que el maravillo y hermoso Espíritu de ese ser supremo en el cual tu crees (para mi Dios) Administre a tu corazón, a lo profundo de tu ser interior.

Saca un momento privado y confiesale a ese ser supremo en forma especifica dónde esta tu dolor.  No lo hagas en forma general, no lo hagas como el que quiere cubrir una lista larga.  Recuerda que esto es entre tú y tu ser supremo para mi (Padre Celestial), ante Él no puedes esconderte, no trates de mentirle ni te mientas a ti mismo.  Dile, qué es lo que te duele y por qué te duele. 

Es importante que le confieses a ese ser supremo (para mi Dios) que tú le das apertura a que Él quite el dolor de tu corazón, que no deseas seguir guardando este dolor.  ESTO ES MUY IMPORTANTE.  Fijate, no tienes por qué guardar tu dolor.  Él es quien te protege, tu dolor no te protege, tu dolor te destruye, te roba, te impide a recibir bendición. 

Puede ser que la persona que tengas que perdonar ya ni siquiera este en este mundo, o ni siquiera esta cerca de tu vida, pero necesitas perdonar porque si sigues viviendo con ese dolor vas a seguir deteniendo la bendición, la felicidad, que ese ser supremo (para mi Dios) tiene para ti.  Tienes que renunciar al dolor, tienes que llamar ese dolor por nombre. 

Y si en algún momento tú has sido la persona que ha causado el dolor, necesitas de corazón traérselo TODO al ser supremo (para mi Dios), no dejando detalles, no dejando nada escondido. 

oh mi ser supremo (para mi Dios), la única persona que verdaderamente conoce mis sentimientos eres Tú.  Otros pueden pensar y opinar, pero en el fondo de mi ser, en mi espíritu, solo Tú me conoces.  Te suplico que mires la necesidad de cada vida que se ha acercado. mira cada corazón que esta leyendo este mensaje. 

FELIZ Y BENDECIDO DIA.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Conociendo a Dios

Cómo vencer la preocupación tomado de la mano de Dios

Dios está pensando en ti